Getafe 1-4 Barcelona. A Messi le basta con media hora.
Partido sin historia en el Coliseum Alfónso Pérez con un Barcelona muy superior durante los 90 minutos. Fueron cuatro goles pero pudieron ser más tras la avalancha de ocasiones del equipo blaugrana a lo largo de todo el encuentro. Lo sde Tito Vilanova no dieron opción alguna a un Getafe que se limitó a evitar que la sangría fuera mayor, y eso que Messi jugó tan sólo media hora. Suficiente para que el astro argentino hiciera un doblete. La cara además la puso Villa que volvió a marcar y poco a poco recupera su nivel de juego. La cruz Puyol lesionado para 4-6 semanas, los años no perdonan.
Sevilla 1-0 Real Madrid. Míchel y el Sevilla tumban a un equipo "sin compromiso"
O eso aseguraba Mou en la sala mixta tras el encuentro, "pocas cabeza comprometidas" alegaba el portugués tras el desastre deportivo. Y es que el Madrid estuvo completamente desconocido, como el resto de liga que llevamos. Un gran Sevilla, intenso, expeditivo y vertical que recordó al de épocas gloriosas con Caparrós en el banquillo, anuló por completo al equipo merengue. Cristiano parecía llorar en cada jugada y Higuaín y Benzema desaparecidos, y Di Maria y Ozil fueron sustituidos en el descanso como parte de esos 7 que no dieron la cara y que le sobraban a Mou. Se salvan los españoles, Casillas, Ramos y Alonso, quizá los que sienten más los colores. Dos derrotas en cuatro partidos que igualan las encajadas la liga pasada. Queda mucha liga y es pronto para preocuparse, más aún con el City a la vuelta de la esquina en Champions. Quizá la máxima competición europea sirva como bálsamo, aunque un pinchazo puede ser muy difícil de digerir en la casa blanca.
Real Sociedad 2-0 Zaragoza. El pasado más reciente se presenta al Zaragoza.
Si algo se ha repetido en temporadas anteriores, es un guión que todos conocemos. Con el equipo desahuciado llega un salvador que se convierte en héroe, transformándose en meses en un villano. La renovación de todos estos obradores del milagro en la Romareda, provocaba un cambio de actitud en sus planteamientos, que empezaban a ser confusos y dubitativos. Hasta la jornada actual Jiménez había mantenido el tipo, con una plantilla más completa que en años anteriores ponía en liza un equipo adecuado y cuanto menos lógico. Pero ha sido en esta cuarta jornada de liga, en Anoeta donde Manolo ha vuelto al recuerdos pasados y ha parecido emular errores de anteriores inquilinos. El once del que dispuso ha sido y será objeto de muchas críticas, más aún cuando dos de los tres jugadores franquicia, tanto por calidad como por emolumentos no fueron de la partida. Sólo Postiga, el otro hombre referencia aportó lo que se espera de él, salvo el gol. La Real poco necesitó para llevarse el encuentro, dos goles a balón parado (uno por penalti absurdo de Paredes) y un orden mínimo le dieron los tres puntos. Próxima cita Osasuna y la obligación de ganar es patente.
Atlético Madrid 4-3 Rayo Vallecano. El Atleti se lo cree y vuelve a ser el de antaño
Sin excesivos alardes el Atlético paso por encima del Rayo Vallecano durante 80 minutos. Arda desbordaba y creaba cuando quería, los laterales parecían extremos, Diego Costa demostró que puede aportar mucho a este equipo y Falcao, siempre Falcao, marcó de nuevo. Cuatro goles de los rojiblancos que bien pudieron ser más, con un juego vertical y con un rigor defensivo santo y seña del Cholo. El Rayo tocó y tocó, pero con nula profundidad (Courtois era un espectador más). Este fue el guión de 80 minutos, un monólogo colchonero hasta que decidieron creérselo y comenzar la verbena. Menos mal que sólo tuvo 10 minutos el Rayo y que sólo tiraron 3 veces. Las suficientes para meter el miedo a toda la parroquia rojiblanca, poner el 4-3 en 7 minutos y recordarle al Atlético que si se lo cree, puede pasar de ser un buen equipo a uno de los más mediocres.